ACUERDOS
Sustituimos la antigua interpretación descriptiva del lenguaje por lo que llamamos la interpretación generativa. Debido a que el lenguaje no es pasivo; debido a que el lenguaje es acción, éste genera permanentemente nuevas realidades. Creamos el mundo con nuestras interpretaciones y relatos y con la capacidad que nos proporciona el lenguaje para coordinar acciones con otros.
Además de hablar de las cosas, hacemos que sucedan cosas.
Al hablar abrimos y cerramos posibilidades de crear nuestro futuro.
Cada observador construye su realidad, y ésta depende de quién es el observador y de qué manera ese observador ve las cosas. La realidad que todo observador se forma según el cristal con el cual observe el mundo, estará condicionado / influenciado por sus creencias, ideas ó estructuras mentales.
¿Son las cosas como las vemos, como las sentimos, o básicamente interpretamos lo que nos han enseñado a interpretar?
Lo que a diario y con piloto automático repetimos sobre el lenguaje; específicamente del “Poder que tienen las Palabras”. Estas poseen una gran fuerza creadora, crean mundos, realidades y, sobre todo, emociones. Las palabras son mágicas: de la nada y sin materia alguna se puede transformar lo que sea. El cómo la utilicemos depende de cada cual. Con las palabras podemos estimular a alguien, hacerlo sentirse bien, transmitirle nuestro apoyo, nuestra admiración, nuestra aceptación, y nuestro amor, pero también podemos destruir su autoestima, su esperanza, condenarlo al fracaso. Este mismo efecto se da también con nosotros mismos; dado que las palabras que usamos o las que pensamos nos están creando cada día. Si somos conscientes del poder de nuestro lenguaje, de su enorme valor, las utilizaremos con cuidado, sabiendo que cada una de ellas está creando algo.
LOS CUATRO ACUERDOS
NO SUPONGAS
No des nada por supuesto.
No des nada por supuesto.
Si tienes duda, aclárala.
Si sospechas, pregunta.
Suponer te hace inventar historias increíbles que sólo envenenan tu alma y que NO TIENEN FUNDAMENTO.
HONRA TUS PALABRAS
Lo que sale de tu boca es lo que eres tú.
Lo que sale de tu boca es lo que eres tú.
Si no honras tus palabras, no te estás honrando a ti mismo; si no te honras a ti mismo, no te amas.
Honrar tus palabras es honrarte a ti mismo, es ser coherente con lo que piensas y con lo que haces.
Eres auténtico. y te hace respetable ante los demás y ante ti mismo.
HAZ SIEMPRE LO MEJOR QUE PUEDAS
Si siempre haces lo mejor que puedas, nunca podrás recriminarte nada o arrepentirte de nada.
NO TE TOMES NADA PERSONAL
Ni la peor ofensa.
Ni el peor desaire.
Ni la más grave herida.
En la medida que alguien te quiere lastimar, en esa medida ese alguien se lastima a sí mismo...
En la medida que alguien te quiere lastimar, en esa medida ese alguien se lastima a sí mismo...
Pero el problema es de él y no tuyo.
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